A la hora de planificar la jubilación, el plan de pensiones se ha convertido en un producto financiero clave como complemento de los derechos y deberes de la Seguridad Social entre los que se establece que a los trabajadores les corresponde una pensión de jubilación. El problema radica en que a menudo la cuantía de dicha pensión no es suficiente o adecuada para mantener el nivel de vida deseado.
Así las cosas, la relevancia de los planes de pensiones nos lleva a definir qué son, cómo funcionan y qué tipos existen.
¿Qué es un plan de pensiones?
Un plan de pensiones es un producto financiero de ahorro e inversión en el que el inversor ejecuta aportaciones periódicas o puntuales para lograr una cuantía adicional en el momento de su jubilación.
El dinero invertido se deposita en carteras de fondos de pensiones. La gestión de estas cuantías sigue unos criterios de rentabilidad y riesgo, establecidos por la política de inversión del plan.
Es importante realizar una gestión activa de este producto financiero, para que se adapte al perfil del inversor en cada etapa de la vida.
Características principales de los planes de pensiones
Este producto financiero se caracteriza por seguir los siguientes criterios:
Su principal objetivo es conseguir ahorros de cara a la jubilación.
Generan ahorro fiscal.
Se puede recuperar el dinero, por lo general, 10 años después de haberlo contratado.
Presentan comisiones anuales, dependiendo de la entidad financiera.
Son productos enfocados a la inversión.
Tipos de planes de pensiones
Existe una gran variedad de planes de pensiones. Pero, se pueden diferenciar siguiendo estas categorías:
Políticas de inversión
Cada plan de pensiones tiene una proporción diferente de activos. Actualmente, se pueden distinguir los siguientes tipos en función de la composición de la cartera:
Renta fija a corto plazo: no tiene activos de renta variable. Los instrumentos financieros de este fondo se mantienen vigentes como máximo dos años.
Renta fija a largo plazo: no dispone de activos de renta variable. Los instrumentos financieros de este fondo se conservan más de dos años.
Renta fija mixta: los activos de renta variable representan menos del 30 %.
Renta variable mixta: entre el 30 % y el 75 % de los activos son de renta variable.
Renta variable: como mínimo el 75 % de los activos son de renta variable.
Tipo de gestión
Para diferenciar los tipos, también hay que tener en cuenta si es una gestión activa o pasiva:
Gestión activa: gestores profesionales investigan y analizan el mercado de forma periódica para adaptar adecuadamente la estrategia de inversión.
Gestión pasiva: emplean las nuevas tecnologías para invertir, ahorrando así en gestores profesionales y, en consecuencia, ahorrando en comisiones.
Promotores
También se pueden clasificar los tipos según quién promueva el plan o de quién sea el titular:
Plan de pensiones individual: engloba gran parte de los planes de pensiones contratables. Sus promotores son entidades financieras y gestoras de activos. El titular del plan es quién aporta las cuantías periódicas al mismo.
Plan de pensión de empleo: son los planes originados por empresas para sus empleados. Las aportaciones las suelen hacer las empresas promotoras o el propio empleado.
Plan de pensión asociado: los motivan los sindicatos, asociaciones o gremios afiliados. Solo los titulares pueden aportar cuantías al plan de pensiones.
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