Cuando dejamos nuestro vehículo en el taller, para una puesta a punto o una reparación, queremos que nos den el mejor servicio al mejor precio.
Todos tenemos un taller de confianza, pero en las ocasiones en las que nos decidimos a cambiar, bien por la necesidad, o bien por voluntad propia, es necesario tener en cuenta una serie de detalles para no tener una mala experiencia.
En este artículo encontrarás todo lo que necesitas saber:
Si esta es tu situación, te damos unas pequeñas pautas que te ayudarán a acertar con tu elección:
Déjate aconsejar por tu aseguradora.
1. Déjate aconsejar por tu aseguradora. Siempre puede haber una pieza mala en un barril de manzanas, pero será más difícil que esto ocurra si el taller esta adherido a la red de talleres de una compañía, ya que estas exigen niveles de calidad muy elevados para que trabajen con ellos.
Inspección ocular.
2. En la primera visita al taller, el encargado o la persona que te atienda deberá hacer una inspección ocular inicial y en base a esta, darte una valoración aproximada del tiempo y el coste de los trabajos a realizar.
Presupuesto final.
3. Si estás conforme con esta valoración inicial, el taller deberá realizar un análisis más detallado del grado de la avería y realizar un presupuesto final que deberá contener al menos: el número de horas de trabajo, el coste de la mano de obra por hora, la relación de piezas a sustituir si fuera necesario y el coste de estas piezas. En caso de que la reparación venga por un siniestro que cubre tu seguro esta valoración la hará un perito de la compañía. Este presupuesto tiene una valoración mínima de 12 días.
«Un análisis más detallado consta del número de horas de trabajo, el coste de la mano de obra por hora, la relación de piezas a sustituir y el coste de estas piezas»
Obligaciones del taller.
4. El taller debe cumplir con algunas obligaciones antes de comenzar una reparación:
Comunicar la existencia de averías ocultas.
Comunicar, en un plazo máximo de 48 horas, si existen o no daños o averías ocultas, desde el momento de su aparición o el fin de la peritación o revisión.
Autorización previa por el propietario.
No comenzar ninguna reparación sin la autorización previa del propietario.
La factura del taller.
En el momento de facturar, el taller debe de cumplir con una serie de obligaciones:
Claridad. Según el Real Decreto 455/2010 ningún documento que sea emitido por el taller y que contenga modificaciones a los derechos de los consumidores, puede tener una letra con una altura inferior a 1,5mm.
Debe contener todos los conceptos desglosados (precio por hora de la mano de obra, horas de trabajo invertidas en la reparación, piezas sustituidas, impuestos, etc.).
Debe ir sellada e identificar al taller con datos de contacto y NIE.
Entrega de las piezas sustituidas o reparadas.
Una vez terminada la reparación, deberán mostrarnos las piezas que hayan sido sustituidas.
La garantía de reparación del taller.
Aunque la ley no obliga a incluir información sobre la garantía de reparación, la garantía mínima legal es de 2.000 km. o 3 meses, no obstante queda a disposición del taller el poder mejorar estas condiciones. La garantía legal para las reparaciones de vehículos industriales es de 2.000 km. o 15 días.
Las hojas de reclamación.
Todo establecimiento ha de tener hojas de reclamación a disposición de sus clientes.
Nuestros clientes cuentan con una serie de beneficios, en nuestra red de talleres, por su condición de asegurados de auto. Descubre estos beneficios y las características de nuestros seguros para coche en Reale Auto o si lo prefieres, localiza tu agencia Reale más cercana y solicita que te asesoren sobre nuestros productos.